Puertas y ventanas del
universo estarán siempre abiertas para recibir el estallido de las primaveras,
la melancolía trágica de los inviernos, el amor, la rebeldía, las raíces y los
frutos de la América nuestra cantados en los versos del poeta semilla que germinó
allá en el Parral chileno para frutecer en todos los surcos de la Tierra.
¿Que cómo fueron aquel
12 de julio y la casita colonial que cobijaron el primer llanto del pequeño
Neftalí?
¿De qué magnitud era la lluvia de Temuco llenando de fragancias, de imágenes y sonidos la adolescencia del chiquillo melancólico?
¿De qué magnitud era la lluvia de Temuco llenando de fragancias, de imágenes y sonidos la adolescencia del chiquillo melancólico?
¿Entre cuáles cristales
de escarcha floreció el amor alumbrando sus primeros versos?
Hoy cumplimos un nuevo
año en la existencia irrenunciable del Neruda universal y los integrantes de
nuestro Centro de Extensión Cultural queremos compartir con ustedes la corona
de sueños que pondremos en la frente del Poeta.
La Casa de la Cultura
con sus líneas de romántico castillo medieval en eterno diálogo con los árboles
de la Plaza, alero propicio para las diversas manifestaciones de las artes, nos
entrega su saludo en el día natalicio del gran vate.
¿Pensó Pablo que su quehacer literario era el de un campesino sembrador de semillas para cosechar frutos de sueño?... ¿Cuántas generaciones de jóvenes despertaron al amor repitiendo aquello de “Puedo escribir…?
Pero son los jóvenes de
este Siglo 21, vertiginoso y desconcertante, los que vienen con sus versos a
proclamar que el ritmo del Pablo de todos, continúa buscando, repitiendo entre
las estrellas las dimensiones exactas de la palabra amor.
Y, aquí ha venido uno de ellos. Es Cecilia Porras Marambio, alumna del 7° año C del San Fernando College para hablarle al gran Premio Nobel en el lenguaje sagrado de los Poetas.
Pero, no sólo entre las
damitas de ahora continúa germinando la semilla de los versos sembrados por el
poeta.
Del Liceo Neandro Schilling, y estando también de vacaciones
de invierno, viene Javier Palacios Salas, alumno del 4° año de Educación Media
para compartirnos su poema de homenaje al natalicio de Pablo.
Ellos son nuestros
embajadores musicales en la Región y en el País. En sus múltiples conciertos y presentaciones,
en los Discos Compactos que han grabado para el disfrute de sus admiradores, en
las intensas jornadas de ensayo, está la huella del Alerce, uno de los grupos
musicales que ha alcanzado el alto nivel de perfección con el cual saben
brindar su arte.
Aquí están con sus
instrumentos: Mario García, Fanny Baez, Pedro Carrasco y Sergio Terán. Son el grupo Alerce de San Fernando que nos
comparten a su manera, el homenaje a Neruda en su cumpleaños.
En el Vigésimo Concurso
Literario Regional, realizado el año 2016 por nuestro Centro de Extensión
Cultural, se recibieron cientos de poemas de las diversas comunas de la Sexta
Región.
Como resultado de la
difícil misión del Jurado, evaluando la belleza literaria, la profundidad de
cada obra en los cuatro niveles del Concurso, resultó ser el mejor del nivel
Escritores el poema creado por el sanfernandino Luis Ibarra González, que lo ofrece hoy a Pablo.
¿Quién de nosotros no
despertó a las primeras luces del amor recitando o leyendo los Veinte
Poemas? La poesía de Pablo constituía un
lenguaje claro, familiar, nuestro.
Podíamos hablarla, compartirla, imitarla expresando sentimientos
personales en versos. Pero, en los
comienzos del Siglo 20 ¿Cómo reaccionó la gente? ¿La recibieron con igual entusiasmo?
¿La sintieron poesía? ¿Comprendieron los sentires del poeta en esos versos sin
medida, sin rima, elaborados con metáforas audaces?
Dicen que el Teatro es
la mejor instancia para mostrar y comprender el complejo entramado de la
existencia humana y en el historial dramático de nuestro San Fernando
encontramos algunos hitos destacados: la Última Cena con la actuación de José
Fuenzalida, del Negro Jiménez, Fernando González y otros que brillaron en los
escenarios de la comuna.
El grupo Tarima y el
Teatro La Matriz mantienen actualmente la tradición dramática de nuestra ciudad
con presentaciones que hacen noticia.
Vinieron del Puerto
Mayor con sus barrios choros y sus domicilios colgados de los cerros. Son el grupo de Teatro La Matriz los
encargados de regresarnos en el tiempo para conocer el impacto que causaron en
los chilenos de entonces, los poemas del segundo libro publicado por Pablo
Neruda cuando recién cumplía 23 años de existencia.
Levantemos el telón
para disfrutar la dramatización musicalizada del libro “Veinte Poemas de Amor y
una Canción Desesperada”.
El Centro de Extensión
Cultural Pablo Neruda no sólo se encarga de difundir la literatura en nuestra
comuna y en la Sexta Región. También
generamos espacios para la creación narrativa y lírica de nuestros socios;
talleres internos de cuyos frutos se nutren las revistas y libros que
publicamos periódicamente.
En esta noche de
celebración, los poetas del Centro Pablo Neruda vienen a rendir homenaje al
vate que alumbra los sueños de amor y de justicia en esta América sin
frontera. Lo hacen con su presente más
personal; Olga Aguilera Bustamante nos comparte su poema de saludo al Poeta. Solicito el aplauso para ella.
Arquitecto de sueños, comprometido en el ardiente proyecto de
construir el puente de amor entre la música y la poesía. Por donde va, con su guitarra terciada como
bandera, pregona la devoción que lo embarga, comparte el diálogo de
primas y bordonas, traduce el vuelo de los versos, despliega las alas de la
música.
Es el cantautor Sergio
Terán Cortez que hoy viene a interpretarnos algunos poemas, a contarnos el
maridaje de la música y la poesía de Pablo Neruda y este es el aplauso de los
sanfernandinos que conocemos y compartimos los desvelos de su siembra cultural.
El poeta y profesor
José Luis Montero Bernales es un estudioso de la dilatada obra literaria de
Pablo Neruda. Investigando, analizando
la valiosa obra del Poeta llegó a nuestra institución, compartió recitales y
talleres con sus sonoridades descriptivas, imágenes y filosofías cotidianas.
Un día lo llaman
vientos de la Frontera. Son raíces vernaculares reanudando el reclamo de la
sangre que necesita desahogar el dolor de los genocidios, proclamar sed de
justicia, gritar rebeliones contenidas.
El poeta no puede
evitar el mandato del oficio.
Continuando el ejemplo del gran Pablo deletreado en su Canto General,
José Luis pregona la tragedia de la raza martirizada y regresa a San Fernando
para dar a la publicidad su obra titulada Cantos Mapuche.
Al llamado de los
nerudianos para incorporar su voz al coro de cumpleaños de nuestro gran Premio
Nobel, nos responde con la certeza de sus convicciones y aquí está para
compartirnos su viaje por la dilatada y rica creación literaria del niño nacido
entre las páginas del invierno, allá en Parral.
Estamos llegando al
término de la ardiente velada convocada para celebrar el natalicio de nuestro
poeta mayor, alzado como un foco inagotable, para alumbrar los senderos de la
poesía nacional y mundial.
Ellos no necesitan una
glosa de presentación. Solamente
puntualizar que son parte del gran fruto musical de San Fernando que ha llevado
el nombre de nuestra ciudad por distintos lugares del país.
Pondrán el broche de
oro a la gran fiesta cumpleañera con el sublime lenguaje de sus instrumentos.
Recibamos con nuestro
mejor aplauso a dos nobeles artistas de la Orquesta Sinfónica Juvenil.
El Centro Pablo Neruda
agradece el valioso aporte de los artistas invitados, de la Casa de la Cultura
y del público presente que ha puesto el marco necesario a esta fiesta de la Poesía.
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