Ya hay ganadores en el XXII Concurso Literario Regional Pablo Neruda 2019, mención Poesía, en los cuatro niveles de participación: Enseñanza Básica - Educación Media - Pobladores (Escritores Emergentes) - Escritores.

sábado, 25 de marzo de 2017

25 DE MARZO - PREPARANDO NUESTRO PLAN DE TRABAJO ANUAL EN LA RUFINA

Una reunión nerudiana en la pre-cordillera.  La Rufina y su marco vegetal, con el sonido cristalino del río cercano vivo y danzante, entre las piedras que brillaban con la luz de un día de sol otoñal, que escondía una grata sorpresa arriba de un árbol: un Tucúquere, búho magallánico, hermoso, aún dormido, porque eso es lo que hizo todo el día, dormir, con ese equilibrio innato de las aves, descansando para entrar en acción cuando llegara la noche.

El motivo del viaje: cargar pilas, prepararnos para el trabajo anual del Pablo y, además, el bautizo nerudiano del poemario año 2017, dedicado en homenaje a la poeta y profesora normalista Elena Demur Célis, y que contiene parte de su biografía y obra poética, además poesía de otros autores conocidos y de nuestro taller.


Este poemario difundirá sus hermosos versos en todos los Recitales de Poesía que realicemos, siendo el primero de ellos ofrecido en el Instituto Comercial Alberto Valenzuela Llanos, el 21 de marzo recién pasado, cuando celebramos con alumnos de educación media y profesores el Día Mundial de la Poesía, siendo regalado a los asistentes, como en cada ocasión.


También se trabajará con su obra para la XIV Lluvia de Poesía, que convocará a los estudiantes de todos los colegios de San Fernando y alrededores, a escribir de puño y letra sus poemas, que luego serán decorados con dibujos y muchos colores, para posteriormente en el mes de octubre, dejarlos caer desde su avión, el piloto José Oyarce Demur, hijo de la poeta homenajeada, y quien año tras año nos ofrece realizar esta hermosa labor, que declara a nuestra ciudad Territorio de Poesía.


Regresamos a San Fernando cuando el sol se alejaba lentamente tras los cerros de La Rufina, todavía añorando el paisaje, el aire puro, la tranquilidad y frescura del entorno, y mientras los poemas que leímos esa tarde todavía se enredaban entre las hojas de los árboles, nosotros ya soñábamos con

un pronto regreso.

martes, 21 de marzo de 2017

21 DE MARZO - DÍA MUNDIAL DE LA POESÍA







Hoy la poesía se respira en el aire, y la Naturaleza principal diseñadora de poemas, se vale de todos sus lenguajes para hacerlo: a través del viento, el sol, los árboles, sus ramajes, sus hojas, para entregar todo el colorido, movimiento, luces, sombras, sonido, vida, en un día tan claro y despejado, que los cerros parecen tan cercanos, como al alcance de la mano. 

Nosotros, los del Pablo, estamos hoy 21 de marzo, en nuestra primera actividad del presente año, preparados para celebrar el Día Mundial de la Poesía, aquí en el Instituto Comercial, que lleva el nombre del pintor sanfernandino de los hermosos paisajes cordilleranos, Alberto Valenzuela Llanos, lugar donde compartiremos los versos con un grupo de jóvenes de enseñanza media dispuestos a enamorarse de la palabra escrita.  Hoy, en el día de una Poesía que no se conforma con un solo día del año, sino que considera suyos todos los días.

En la Biblioteca se encuentra don Carlos Montecinos, Director del Instituto, algunos profesores y treinta y cinco alumnos, en el ambiente más propicio para un Recital de Poesía, el lugar donde los libros son personajes principales.

Cada asistente recibe uno de los Poemarios recién confeccionados, desde donde vamos a leer y compartir.  El tiempo no existe, y comenzando nosotros, como siempre, uno a uno lee un poema propio o de la poeta Elena Demur, a quien estamos manifestando nuestro aprecio por su calidad de ser humano, y su vena poética plena de detalles y colores, que durante este año será leída por muchas personas más en otras diversas actividades nuestras.  Estudió en la Escuela Normal de Talca y dedicó su vida a la docencia.  De su obra poética podemos intuir la grandeza de su espíritu, su sensibilidad, honestidad, y el gran amor que sentía por su familia y por sus “niños”, los alumnos, con versos en los que reflejó con cada vivencia, las etapas de su vida, la naturaleza y el amor.
 
Luego de jubilar, continuó su labor en el liceo José Gregorio Argomedo, colegio en el que tuvo el honor de trabajar junto a ella, el profesor de matemáticas, ahora del Instituto Comercial, don Enrique González, cuyo deseo ha sido rendir también hoy y aquí, un homenaje a esta gran dama, empática, trabajadora más allá del deber, para lograr los más elevados propósitos en bien de sus alumnos.

La lectura de poemas tiene el fondo musical de la guitarra de nuestro amigo Miguel Llanos quien además interpreta diversos temas para todos nosotros, entre ellos  “Alfonsina y el mar” de Ariel Ramírez y Félix Luna, y el poema de Gabriela Mistral “Miedo” (“Yo no quiero que a mi niña golondrina me la vuelvan…"), el cual musicalizó tiempo atrás.  Luego de nuestra intervención, le corresponde a los alumnos asistentes participar, y esta vez vari@s jóvenes se acercan a compartirnos un poema, también los profesores se atreven, e incluso la alumna Paz Orellana, acompañada por nuestro guitarrista, interpreta una versión moderna y muy interesante de “Los momentos” de Eduardo Gatti.

Hoy, como las abejas de un panal, hemos podido repartir entre todos la miel de la palabra poética instando a tod@s est@s jóvenes a vivir y sentir la poesía como una parte muy cercana de sus vidas,  ya que la poesía es una gran herramienta de transmutación en los momentos difíciles y las encrucijadas de la vida, que nos ayuda también a exponer sentimientos y emociones, y sirve para expresar de otro modo lo que a veces nos cuesta decir.  La poesía existe en cada uno, aunque no lo sepamos, ahora hay que ayudarla a salir, a decir, sacarla de nuestro interior y escoger mirar la vida y el mundo a través de ella, porque la poesía nos hace compartir y no competir.

POEMARIO 2017 CENTRO PABLO NERUDA

Dentro de la variada gama de actividades del Plan de Trabajo del Centro de Extensión Cultural Pablo Neruda de San Fernando, es de gran importancia la preparación del poemario de cada año, que contiene parte de la obra de un poeta nacional seleccionado, a quien se le rendirá homenaje en actividades como los Recitales, el Encuentro de Escritores y la Lluvia de Poesía.

Si Chile es un país de poetas, San Fernando es territorio de poesía, ya que cada año y también en esta Décimo Cuarta versión 2017, se da a conocer la vida y obra de personas como usted o como yo, con diversas actividades en su vida cotidiana, pero con el amor por la palabra escrita dentro de su alma.

La Poesía es parte de nosotros aunque no lo sepamos.  Cada momento vivido, cada experiencia, lleva intrínsecamente la poesía entre sus venas, porque además de la percepción ilusoria de nuestros acotados sentidos, está el sentir desde la esencia, que nos abre un abanico inesperado a ese mundo donde todo es posible, porque la poesía nos enseña que no tenemos solamente cinco sentidos, sino que cada poro de nuestro cuerpo es un nuevo sentido para absorver el exterior y ejecutar la alquimia de la palabra sintiendo en nuestro interior esa magia que todo lo transforma y todo lo mejora.

Entonces, todo instante puede ser poético: cuando nace un bebé dentro de la familia; si alguien se enamora; o un ser querido nos deja para siempre: la poesía es parte, mientras seamos capaces de entender, transmutar, sentir y escribirla.

Este año, la profesora y poeta Elena Demur estará presente dentro de una escuela, en una plaza, en nuestra ciudad o en otra, donde lleguemos con un Recital de Poesía ella será conocida, su expresión poética nos dirá mucho más de Elena que su biografía, porque encierra lo que se puede intuir.

"Elena Demur Celis, una maravillosa mujer, nacida en Agua Buena, provincia de Colchagua en 1929, en el último día de Octubre, cuando el calor era retardado por la alegre brisa primaveral.  Los parrones verdes y los cerezos cargados de frutos, inspiraban a quien sería una Maestra Normalista que daría su vida entera a la formación integral de los "niños"... sus niños... los alumnos."

Esta es parte de su biografía, escrita por su hijo José Oyarce, quien cada año en Octubre, pone su avión a nuestra disposición, lo llena con la poesía de cada poeta homenajeado en esa ocasión, escrita de puño y letra por alumnos de todos los colegios de San Fernando y alrededores, en volantes maravillosos llenos de colorido y dibujos, decorados para ser enviados desde el avión cuyo piloto es el señor Oyarce, que también lleva la poesía en su interior, enseñada por su madre, con ese ejemplo de vida que los niños aprenden a admirar y también hacen suyo, y en medio de una hermosa actividad que se realiza en la Plazuela del Guerrillero Manuel Rodríguez, mientras se leerán ese año los versos de Elena Demur a toda la gente que transite por el lugar ese día, su hijo desde el cielo, dejará caer toda la magnífica inspiración de esta poeta, con ese gran homenaje a sus versos, sobre las calles de nuestra ciudad.